Por Lucía Isaurralde, estudiante de Ingeniería Industrial y miembro de la Comisión de Mujeres de la UNGS; y Marco Balbi, representante estudiantil suplente del Comité de Carrera de Comunicación y Secretario del CEUNGS.
Nuestra posición, que publicamos para las elecciones de
CeUNGS del año pasado en vísperas del ballotage nacional entre Macri y Scioli,
sobre la actitud que tomaría el kirchnerismo frente al ajuste macrista se
comprobó este año durante el conflicto educativo más importante de los últimos
17 años.
La ausencia del CeUNGS
como herramienta sindical para organizar activamente a los estudiantes contra
el recorte presupuestario no le salió gratis a su anterior conducción, el FUNyP. A pesar de haber incorporado a La
Mecha a su lista (Unidos por la UNGS), y de haber obtenido el 39% de los votos,
el Frente de Estudiantes de Izquierda
(FEI) alcanzó el 44%, y se convirtió de esta manera en la nueva conducción del
CeUNGS. En tercer lugar, se ubicó el Frente de Estudiantes en Lucha (FEL)
con un 15%, ocupando el lugar que le pertenecía a La Mecha (el año pasado esta
última agrupación sacó el mismo porcentaje).

La victoria de la izquierda no es menor si tenemos en cuenta
que la UNGS es probablemente la universidad más grande de Zona Norte (lugar estratégico para forjar alianza con
los trabajadores), y a su vez uno de los
principales bastiones del kirchnerismo, sobre todo por la ligazón política que existe entre el gobierno universitario, apoyado en
un sector de investigadores docentes que gozan de privilegios materiales y
políticos, y el Frente Para la Victoria – PJ
a nivel nacional.
La situación inédita
este año fue que el kirchnerismo pasó a ser “oposición” a nivel nacional por
primera vez en doce años,
y en la universidad el FUNyP tenía que pasar la prueba de conducir el CeUNGS en
un contexto de ajuste en general y sobre la educación pública en particular. A
pesar de todos los discursos que ha intentado instalar el kirchnerismo
para polarizar contra el macrismo, la mayoría de los estudiantes eligieron a la
única fuerza política que se plantó contra el ajuste de Macri, la izquierda.
Un reconocimiento a una
estrategia de lucha y a un programa de democratización de la UNGS
De las dos estrategias que mencionábamos que desplegarían las
principales fuerzas políticas estudiantiles de la universidad, quedó claro cuál
es la única que le impidió al macrismo avanzar con el recorte presupuestario
hacia la educación pública superior. El voto al FEI fue, en parte, un
reconocimiento por la puesta en práctica de esa estrategia.
Por su parte, el FUNyP como presidencia del CeUNGS no tuvo
ninguna política para que los estudiantes de la UNGS se organicen de manera
consciente contra el recorte presupuestario. Estudiantes de carreras diversas, principalmente de Comunicación, comenzamos
a organizarnos por fuera de un CeUNGS totalmente paralizado. En este
contexto, fueron únicamente las agrupaciones del FEI las que empezaron a
alentar la organización estudiantil.
¿A qué se debió la parálisis que le imprimió el FUNyP al
CeUNGS? Representante del rectorado en
el claustro estudiantil, el objetivo de la agrupación kirchnerista es siempre
velar por el status quo universitario. Organizar a los estudiantes contra los
ataques hacia la educación pública por parte del gobierno de Macri podría decantar
en un cuestionamiento más general hacia el gobierno universitario, teniendo
en cuenta que ha jugado un papel de administrador de ese presupuesto recortado
y que aumentará los efectos sobre los problemas estructurales que padece el
claustro estudiantil (deserción, alargamiento de los años de carrera, bajas
tasas de graduación, dificultosa inserción laboral, etc.).
Por esta razón, quienes hacemos Apuntes Universitarios, apenas nos enteramos
del recorte presupuestario, levantamos una consigna de control democrático sobre el presupuesto universitario por parte del
claustro estudiantil, que la hemos incorporado a nuestro programa para estas
elecciones.
Si los investigadores docentes que controlan los órganos de
gobierno universitario, donde se toman las principales decisiones, son los
encargados de administrar el recorte, se debe a su presencia mayoritaria en
dichos espacios (Consejo Superior, Asamblea Universitaria y Consejos de
Instituto), en detrimento de las necesidades del claustro estudiantil que poseemos
una representación minoritaria. Por esta razón, otro punto programático del frente que ganó las elecciones es la
democratización de los órganos de gobierno, y particularmente desde Apuntes
Universitarios hemos basado nuestra campaña en plantear mayoría estudiantil
para esos lugares de decisión.
Comunicación, un
ejemplo de organización estudiantil
Como mencionamos anteriormente, el sector de estudiantes que
primero se puso en pie fue el de los que cursan Licenciatura en Comunicación.
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Primer asamblea de Comunicación del año frente al recorte presupuestario |
El 9 de mayo se realizó
la primer asamblea estudiantil para empezar a organizarnos contra el recorte
presupuestario,
que a su vez fue la primer asamblea de la carrera del año y de toda la UNGS por
este tema, a tan
sólo cuatro días de la gran Marcha Educativa que reunió a 50000 personas en la
calle, entre estudiantes y docentes. Luego de haber realizado una intensa
campaña de difusión por las cursadas,
y de haber propuesto delegados en algunas de las mismas, hemos mantenido una
dinámica que nos permitió no sólo continuar con las asambleas, sino también
organizar una clase pública de la asignatura Comunicación Mediática. Toda esta
experiencia acumulada en el primer semestre culminó en una gran movilización
estudiantil, desde la UNGS hacia el centro de San Miguel, de la que fuimos
protagonistas junto al resto de las fuerzas del FEI.
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Movilización hacia el centro de San Miguel |
La organización que ha
adoptado nuestra carrera se debe a nuestra intervención desde hace ya dos años. En ese tiempo, el rol del
oficialismo siempre ha sido desactivar la participación estudiantil en
instancias asamblearias o desviar los cuestionamientos hacia el gobierno
universitario. Si no es así, no se
explica por qué en las otras carreras donde Unidos por la UNGS tienen
representantes estudiantiles no existe la organización estudiantil que hay en
Comunicación.
Este año se han modificado algunas correlatividades de la
carrera, de manera favorable para los estudiantes, y se han realizado reuniones
entre la Coordinación de la Carrera y los estudiantes para consensuar días y
horarios de la oferta académica para evitar casos de superposición. Estas dos
cuestiones tampoco es una política general del rectorado hacia todas las
carreras, ya que no pasa en ninguna otra. ¿Por qué pasa entonces sólo en
Comunicación? Insistimos: por la organización estudiantil que hay detrás. En
este sentido, también planteamos un
punto programático para que los estudiantes podamos decidir por nuestra cuenta
sobre nuestras carreras: Comités de carrera resolutivos y con mayoría
estudiantil.
Si bien Comunicación es una de las carreras donde el
kirchnerismo siempre ha pisado fuerte, su inacción para organizar a los
estudiantes, ya sea para pelear contra el ajuste de Macri o para la apertura de
nuevas comisiones de materias, nos ha empezado a mostrar como una referencia.
Teniendo en cuenta todo lo mencionado, resultó
lógico que las elecciones del CeUNGS también se expresaran a través de
nuestra carrera. En otras palabras, Comunicación es la expresión de la disputa
existente entre el kirchnerismo y la izquierda. Apoyando al primero, algunos investigadores
docentes que militan para el régimen han realizado las mil y un maniobras para
que a los candidatos del FEI de la carrera de Comunicación se nos dificulte las
pasadas por las cursadas invitando a nuestros compañeros a votar y contándoles
nuestras propuestas.
La organización de las
mujeres
Otro frente en el que el FEI se hizo fuerte y trabajó durante
todo el año fue el de la pelea por los derechos de las mujeres, contra la
violencia machista en general, y los femicidios en particular.
Tres de las cuatro
fuerzas que componemos el FEI participamos de la Comisión de Mujeres. Desde allí defendimos el cupo para
que los hijos de las madres estudiantes puedan seguir concurriendo al jardín
maternal de la UNGS, en un intento de recortarlo por parte del gobierno
universitario; y
organizamos un festival cultural, al que se acercaron aproximadamente 300
personas de toda la comunidad, para que las mujeres puedan participar del
Encuentro Nacional de Mujeres (ENM).
Todo este esfuerzo se
hizo con la gestión universitaria y su lista candidata para las elecciones,
Unidos por la UNGS, en contra. Para la realización del festival la gestión
no facilitó ni el auditorio ni el sonido, y tampoco permitió que mujeres de la
comunidad puedan viajar en los micros que salían desde la UNGS hacia Rosario,
ciudad donde se llevó a cabo el ENM. Para esto último, la gestión contó con el
apoyo del FUNyP y de La Mecha, que tampoco participaron de la Comisión de
Mujeres.
Por último, cabe señalar que fue la misma gestión la que
garantizó el normal funcionamiento de la UNGS el 19 de octubre, el día del
Primer Paro Nacional de Mujeres, impidiendo
que miles de compañeras puedan asistir a lo que fue el evento político de masas
más convocante del año y que llegó a tener alcance internacional.
En síntesis, la elección por nuestra lista, compuesta por un
70% de mujeres, y un solo hombre entre las candidatas titulares, también
expresó la consecuente política que tuvimos durante el año para organizar a las
mujeres.
Perspectivas hacia el
2017…
“La continuidad
del FEI como fuerza política en la UNGS (en estos dos años) abre las puertas a
una fracción de izquierda y combativa antes los posibles ataques a la
educación, en una coyuntura de crisis internacional que ya no es favorable para
la Argentina como para el resto de los países de la región”.
(Ver completo: El rectorado recuperó el CEUNGS. Algunas reflexiones post elecciones).
Gran parte de las tareas que nos propongamos como CeUNGS de
cara al año que viene dependerá de la situación política y económica en la que
nos encontremos. Una de las posibilidades es que la llegada de algunas
inversiones y la emisión de deuda le permitan al gobierno nacional hacerse de
un “colchón” de divisas que le permita transitar el 2017 sin demasiados
sobresaltos, justo en un año de elecciones. A pesar de ello, la reciente
victoria de Donald Trump como presidente de Estados Unidos no parece ser una
noticia demasiado alentadora para la economía argentina.
Meses atrás, la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea también le había
significado un golpe inesperado al macrismo.
Como si fuera poco, el
Congreso está por votar un presupuesto de ajuste para el 2017 que no contempla
aumento en el presupuesto para 35 de las 56 universidades nacionales. Entre las
universidades que se quedarían afuera, aparece la nuestra.
Para poder aprobar este proyecto, como lo hizo con el pago a los fondos
buitres, el nombramiento de dos nuevos jefes de la Corte Suprema, y el blanqueo
de capitales entre otras cuestiones, el macrismo cuenta con el apoyo del Bloque
de Senadores del FpV-PJ. Vale la pena recordar, que los gobernadores de esta
misma fuerza política fueron quienes aceptaron los fondos provenientes del
presupuesto recortado a las universidades. En resumen, el kirchnerismo combina sectores que no enfrentan al macrismo con
sectores que directamente acompañan y son cómplices de su política de ajuste.
De hecho, en varias provincias donde gobiernan ajustan y reprimen como lo pide
el gobierno nacional. Esta es la razón principal por la cual sostenemos que el
FEI debe mantener su independencia política de cualquier fuerza capitalista
(hoy todas comparten el mismo programa de ajuste, inclusive el “Partido
Socialista” en Santa Fe).
Tal como lo habíamos señalado en el balance que
publicamos el año pasado, y como dice su fragmento que encabeza este apartado, este año comenzaron a surgir nuevos
sectores en el movimiento estudiantil de la UNGS, que han demostrado
intenciones de lucha frente al macrismo y que efectivamente salieron a las
calles. Parte de ese sector ya ha hecho una experiencia con un kirchnerismo que no sólo no lucha ni en la
universidad ni a nivel nacional, sino que pone todas las trabas posibles para
impedir que se desarrolle un movimiento estudiantil independiente de su política.
Apostar al desarrollo de este movimiento estudiantil, a través delegados por
cursada, y asambleas por carrera, es la gran tarea que consideramos que debe
asumir el FEI el año que viene para pelear
contra el ajuste de Macri y el kirchnerismo, contra el gobierno universitario
que mantiene un régimen de gobierno antidemocrático y que de a poco ha
comenzado a descargar el ajuste sobre el claustro estudiantil, y contra el
patriarcado. Esos son los frentes de batallas que tenemos que unir. ¡Manos
a la obra!