El motivo del no inicio de clases convocado por el
sindicato docente de la UNGS (Adiungs) no sólo fue por un reclamo salarial,
sino también por una crisis presupuestaria: hace seis meses que el
Ministerio de Educación de la Nación no envía los fondos destinados a gastos de
funcionamiento (luz, gas, agua, becas y otros servicios). Los
investigadores universitarios que gobiernan la universidad nos mantuvieron a
los estudiantes desinformados durante todo este tiempo, y al parecer a la
rectora Gabriela Diker no le preocupa hacer un informe detallado sobre esta delicada
situación. ¿Cómo se viene financiando la universidad?
A fines de marzo, el gobierno había
anunciado un recorte de 3 mil millones de pesos al presupuesto universitario.
Si a esto le agregamos el ajuste vía devaluación, inflación y tarifazos,
podemos decir que estamos ante una situación sumamente crítica al punto
que varias universidades anunciaron que podrían no terminar el año.
¿Y la UNGS? A pesar de la preocupación aparente que muestran los rectores, son
ellos quienes agrupados en el CIN (Consejo Interuniversitario Nacional) votan y
avalan los presupuestos a la baja.
Este ataque a la
educación en general se enmarca en un desguace al sistema público de conjunto. En verano cerró Ferrobaires, el INTI, hubo
despidos en el Hospital Posadas, y tras la llegada del FMI, se sumaron los
despidos en Télam, y el intento de “dinamitar el Astillero Río Santiago” (en
palabras del propio Mauricio de Macri), cuyos trabajadores fueron reprimidos
duramente por la policía de Vidal la semana pasada.
Las consecuencias del
pacto entre Macri y el FMI, al que varios gobernadores peronistas apoyaron, ya
están a la vista, aunque esto es sólo el comienzo. Luego de los recortes, el próximo
paso del gobierno será el arancelamiento de la educación superior. Estamos
en la antesala de la privatización
de la educación universitaria, tarea que el menemismo, el Banco Mundial
y el FMI no pudieron llevar hasta el final en los ’90 con la Ley de Educación
Superior (LES) producto de la respuesta del movimiento estudiantil y los
trabajadores de la educación, y que ahora Cambiemos pretende
retomar.
¿Cuál es la situación de los estudiantes y qué rol
tenemos que jugar?
La caída de los salarios, la
precarización laboral y el desempleo juvenil ha llevado a varios estudiantes
trabajadores y de familias trabajadores a tener que abandonar sus
estudios o cursar menos materias en el mejor de los casos. En estos
momentos nuestras demandas se vuelven más sentidas que nunca: aplicación
del boleto educativo, ampliación de la oferta académica con cátedras paralelas,
y aumento de los montos de becas que sean irrestrictas.
Los estudiantes somos los más
afectados por el recorte de presupuesto, sin embargo ha sido poca nuestra
participación en las asambleas y movilizaciones que se dieron en el marco del no
inicio de clases formal que hubo en la UNGS estas semanas. Ese es el límite que
tuvieron esas medidas. Hay que ser claros: sin participación del
conjunto de los estudiantes no habrá defensa de la educación pública efectiva.
Si bien de cara al 30 está la convocatoria a la
marcha nacional universitaria, que será masiva y seguramente muchos estudiantes
quieran participar, tenemos que organizarnos desde las aulas para
garantizar la continuidad de estas medidas. ¿Y después de la marcha qué? Al
menos la experiencia del 2016 nos indica que luego de la gran marcha nacional
de aquel año, los docentes acordaron paritarias y abandonaron la lucha,
dejándonos a los estudiantes peleando en soledad por nuestras demandas y el
recorte presupuestario. Por esta razón, resulta
necesario que comencemos a llevar adelante instancias de organización propias.
Elijamos
delegados por cursada para organizar las aulas y garantizar la participación de
los estudiantes en la marcha del jueves 30; para darle continuidad a la lucha
universitaria e incluir nuestras demandas.
Para
discutir esto, convocamos a los representantes estudiantiles de otras
carreras, a los consejeros estudiantiles, y a las agrupaciones del Centro de
Estudiantes a una asamblea estudiantil el miércoles 29 de agosto a las
19:30 hs en la entrada de la universidad.
¡En defensa de la educación pública!
¡NO al recorte presupuestario!
¡Aplicación del boleto
educativo gratuito YA en la UNGS!
¡Control democrático del
presupuesto universitario por parte del claustro estudiantil!
¡Abajo el ajuste de
Macri, el PJ y el FMI! ¡No al pago de la deuda externa!
¡Separación de la
Iglesia y el Estado! ¡Plata para la educación!
Representantes
estudiantiles de Comunicación

Secretaría
de Cultura y Expresión del CEUNGS
FEI!
(Frente
de Estudiantes de Izquierda – Presidencia del CEUNGS)